10 (Hamar)
Diez años que ya no estás (y tu aita ya vas sumando cuatro). Ya sabes que en este último tiempo la Vida se me ha puesto un poco más exigente. Y cuando el corazón anda arrugado, la versión más puñetera de la soledad intenta campar a sus anchas. Y me está costando un poco más. Y en esas sigo descubriendo el poder de la sombra. La fuerza que radica en mi más profunda y neta vulnerabilidad. Y que el dolor, duele. Y tiene que doler. Y que no, no puedo con todo. Y que todo está bien. Y que también es tiempo de amistad, de mucha conversación y de mucho amor. De personas maravillosas que son luz. Y sí, tú, y el aita, seguís estando muy presentes. A veces os sonrío observando un cielo que dibuja nubes y luces y colores. Y cuando me permito que el silencio me respire, emana un Soy amplio, poroso, fluído, que va más allá de lo que soy. Sé que suena raro, jeje. Pero no se me ha ido la pelota, tranquila. Sólo que soy más consciente. Más libre. Más… niña. Siempre me decías, que aunque tuviera 60 años… yo siempre sería «tu pequeñita». Pues eso. Soy tu pequeñita. Y también soy pequeñita. Y así, pequeñita, os sigo echando de menos. No cada día ni todo el rato. No con dolor ni angustia. Sino como preciada ausencia que habita y nutre mi pequeño corazón. Y que os quiero. Maite zaituztet! Eeeegunon bioi!!! Eeeeegunon mundo!!
#9
Bederatzi urte jada. Nueve años. Y como cada 23 de julio me asomo a esta ventana en el que puedo imaginar que te cuento cosas mientras nos tomamos un buen café con leche. Y contarte que… tengo tantas cosas que contarte. Que quizás el silencio pueda decirte mucho más. Tú conocías tan bien mi silencio. E intuías las palabras que se acurrucaban detrás de aquel no decir. Contarte que eso, que la Vida. Que bonita. Que intensa y exigente. Que sabe como hacer para que la siga Viviendo, Vivita y vivaz. Y coleando. Y vividora… (disfrutona, me dice alguno). Y que estoy bien. Que las sombras siguen ofreciéndome forma; y a ratos explican, mi luz. Y que tengo mucha. Mucha luz en mi Vida. Soy afortunada. Contarte que te pienso mucho. Y muchas, muchas veces, te echo de menos. Y mucho. Y al hacerlo, sonrío. Hoy me tomaré 9 cafés, o al menos 9 sorbitos. Llenos. Bien saboreados. Y compartidos. También contigo. Por todo lo bueno recibido. Por tanto, tanto que todavía hoy, me sigues dando. Eeeegunon ama! Eeeegunon mundo!!
ama
En mi corazón… todos los días. Eeeeegunon mundo!! #ama #mamá #madre #mom #mutter #ammee #mae #DíaDeLaMadre
en mi corazón
En mi corazón, presencia, mirada, alegría. En mi corazón, vuestra luz. En mi corazón el vuestro. Eeeeegunon mundo!! Nire bihotzean zuen indarra eta argia. Nire bihotzean esker onez eta irrifarrez bete dezuten bizitza. Nire bihotzean zuen bihotza. Eeeeegunon mundo!
tanto
Tanto. Tanto recibido. Tanto aprendido. Tanto… Y tengo el corazón tan tan lleno de agradecimiento… tanto. Y os echo tanto de menos. Y os quiero tanto. Eeeegunon mundo!! Hainbat. Hainbat maitasun.Hainbat oroimen. Hainbat besarkada. Hainbat jasoa. Ikasia. Hainbatetan. Hainbestetan. Zuen falta. Beti nire bihotzean. Eeeeegunon mundo!!
zortzi (eta bat t´erdi) 23.07
Amatxo maitia. Aitatxo maitia. El 23 de julio se ha convertido en ese día en el que me gusta escribiros unas palabras. Contaros cómo me va. Y tomarnos ese café juntitos. Han pasado ocho años ya ama, en un día como hoy. Aitatxo, tu llevas con la ama un añito y medio. Y todos los días en mi corazón. Andaba yo pensando en qué contaros hoy. Ha sido un año intenso, de cambio. De mucho movimiento, de mucha Vida. Muchas cosas que compartiros. Y luego la semana se ha ido pronunciando con la despedida de quien tanto y tan bien os cuidó. Quien, como lo fuistes vosotros, ha sido un ejemplo en la manera de Vivir… y también de decir(nos) adiós. Y quien nos deja también, esos vaciós enormes que toca llenar con mucha, mucha Vida. Aiii… el cielo se nos está llenando de estrellas. Porque habéis contribuído a tanta Vida en Vida. Y nos habéis regalado tanto ejemplo de Vida también con vuestro adiós. Me doy cuenta, este año más que nunca y cada día más que el anterior, que en cada eeeegunon mundo, en cada una de mis sonrisas y también de mis pequeños grandes llantos, hay pura Vida. Que se trata de elegir, aceptarla y vivirla. Y ese increíble regalo de Vida me lo habéis dado vosotros/as. Haciéndome más y más consciente de la importancia de celebrar la Vida. De disfrutarla. De compartirla. De no esperar a los grandes acontecimientos y hacer de cada día uno de ellos. Vuestro regalo ha sido darme la Vida y enseñarme a vivirla en Vida. Vivir con los brazos abiertos. Vivirla a pleno corazón. Aunque a ratos duela, aunque no siempre sea fácil … y sin duda es siempre nueva y posible. Dispuesta a recibir lo que está por venir. Vivir sin esperar mucho. Ofreciéndome entera. He tenido el privilegio de nacer aquí. De crecer con mucho. De tener oportunidades para decidir, para Ser. He tenido el regalo de ser querida. De querer. De llenar mi corazón de nombres. Vosotros dejasteis el vuestro en el corazón de muchos, de muuuuchas de nosotros/as. Y eso es el arte de las personas que saben Vivir y compartir(se) a pleno corazón. Eskerrikasko amatxo… eskerrikasko aitatxo. Por tanto y tan bueno recibido… todavía hoy (actualizándose cada día). Y os echo taaaaanto de menos. Amatxo, llevamos ya «ocho cafés con leche de ausencia». Y eso son muchos cafés… Hoñy me tomaré éste, el primero de la mañana contigo. Eeeeegunon ama, eeeegunon aita! Eeeegunon mundo!!
ama VI
Por tanta(s) Vida(s) que (nos) dais, que nos habéis dado. Que (nos) seguís dando. A todas las amas, mamás, moms, amatxos, madres… del mundo mundial: ¡Gracias! Eskerrikasko! Este Eeeegunon mundo!! es por (para) todas vosotras. ::: Amatxo… zuretzat!!! Amatxo… zuretzat!!! (nire bihotzean zaude, nire bizitzan zaitut)
zazpi (23.07) y otro mucho más (27.02)
Aiiiii… ya van pa´siete amatxito. Y tu aita, que quisiste ir a verla hace unos poquitos meses. Y se empieza a hacer largo el no verte. Aquí nos habéis dejado… aquí me habéis dejado. Y sólo de pensaros… os siento cerca. Cerca de cada decisión que en este tiempo voy tomando, de cada desierto que ando cruzando; De cada una de las alegrías que la Vida me sigue regalando. Sólo de sentiros… me emociono. Me emociona pasear por el malecón de Zarautz y «verte» a algún jubilado con galtzamotxas (=pantalón corto) Imaginarme paseando por la Gran Vía de Bilbao contigo ama (cuánto disfrutarías de esta ciudad, que ya es un poco mía). Una sonrisa se asoma al corazón cuando cierro los ojos y puedo intuiros. Y mi Vida anda hinchadita de agradecimiento. Y sí. También. A ratitos me siento sola, y necesitaría un abrazo así, sin más. De esos que se dan porque sí. Porque yo era vuestra «pequeñita». Y ahora ya no soy la pequeñita de nadie, no así, anymore. La Vida está fluyendo, se está moviendo… ¿Será que vosotros/as también me andáis empujando y animando? Necesito el aliento de vuestra ternura, ese toque de preocupación, y la confianza con la que siempre me habéis sabido acompañar, en cada una de mis pequeñas grandes locuras (a veces no os quedaba más remedio, verdad? jeje) . ¿Ya os he dicho que os echo de menos?¿Que os echo mucho, mucho de menos? ¿Y sabéis que en cada saludo mañanero, os saludo con este corazón ligero y porrompompero? Eeeeegunon, egunero. Eeeeegunon mundo!! PD: Y qué, aita, feliz con la ama no? ¡Ya te digo! [flagallery gid=33]
(m)ama
A esas grandes mujeres que abren sus brazos y nos acogen en ellos durante toda la Vida. A nuestras amas, mamás, amatxos, amatxus y mamis. A mi amatxo… a la que ando extrañando. A la que sigo pensando y sintiendo. A la que me sigue acompañando. A ese abrazo imprescindible y eterno que me sigue cobijando. Eeeeegunon mundo!!!